Quédate para poderte hablar
cuéntame, si pudiste olvidar
tantas cosas vividas
y aquĂ©l dĂa tras dĂa
porque yo no lo pude lograr.
Quédate, sólo por recordar
que una vez, tan cerca del altar
tĂș, mi amor, me decĂas
y yo casi morĂa
y eso menos lo pude olvidar.
Yo te recuerdo tanto,
hasta decir bastante
no olvido tu sonrisa
y aquellos ojos grandes
yo te recuerdo tanto
tanto, tanto, tanto...
que para qué olvidarte.
Quédate, sólo por recordar
que una vez, tan cerca del altar
tĂș, mi amor, me decĂas
y yo casi morĂa
y eso menos lo pude olvidar.
Yo te recuerdo tanto,
hasta decir bastante
no olvido tu sonrisa
y aquellos ojos grandes
yo te recuerdo tanto
tanto, tanto, tanto...
que para qué olvidarte.